Comprar objetivos…
Hoy en día existen en Internet multitud de webs en las que se publican estudios, test, pruebas, etc. de todo tipo de objetivos para nuestras cámaras, pero desde hace ya tiempo, Flickriver nos ofrece un servicio online que nos permite navegar por las fotos de flickr, y ahora a incorporado a este servicio un navegador de fotos según el objetivo con el que han sido hechas… lo cual nos parece extremadamente útil a la hora de valorar si una lente nos va a ofrecer las focales adecuadas a lo que buscamos, o la nitidez que esperamos, o si sus niveles de contrate cumplen con nuestras expectativas… ese servicio es el Flickriver Lens Explorer
También hay como decía antes, multitud de sitios con datos técnicos, casi todos en ingles (me refiero evidentemente a los de mas prestigio, que no siempre son los mejores…) yo suelo visitar cuando busco información para alguna lente, las webs Photozone, Ken Rockwell, Fred Miranda, y ya en castellano una de las webs de referencia es Digital Camera Lens.
No obstante y en mi opinión, no hay que fiarse al 100% de ninguna Web y es mejor contrastar resultados y opiniones de varias, ya que a muchas de las webs que publican opinión en Internet «se les ve el plumero» en ocasiones y parecen estar influenciados mas por las marcas, que por los resultados de sus propios análisis, no quiero pensar en manipulaciones de información a consecuencia de contratos con algunas marcas, no quiero pensarlo… pero no puedo evitar hacerlo…
Hay un consejo que por mis años de experiencia en este mundillo de la fotografía me permito dar… yo uso aún objetivos que compré con 18 años y tengo casi 50… no debemos «racanear» a la hora de comprar una lente, si somos cuidadosos nos durará muchos años y la nitidez y la calidad óptica es algo fundamental en la fotografía, las cámaras se acaban antes (y mucho más ahora en la época digital…) pero las buenas lentes, bien cuidadas nos darán mucho rendimiento. Estudiad bien lo que buscáis, y luego buscad el sitio más apropiado para adquirirlo, pero no os dejéis llevar por impulsos, ni precios llamativos, en fotografía como en casi todo… lo bueno hay que pagarlo.
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